Los controles de voz, desde tiempo atrás, siempre se han planteado como la «alternativa segura» a la utilización del teléfono móvil durante la conducción. ¿Por qué? Básicamente porque nos permite continuar manteniendo las manos en el volante y los ojos en la carretera, pero un estudio reciente demuestra que estos asistentes virtuales son más peligrosos que usar el móvil.
Según el estudio que nos ocupa en estas líneas, utilizar los comandos de voz puede suponer un peligro mayor que tomar el móvil y utilizarlo directamente, al menos en el caso de los teléfonos inteligentes de Apple y con respecto al asistente virtual Siri, que es el que se ha probado en este estudio, aunque los datos son extensibles a otros homólogos igual de «mal terminados». El problema de este
El problema principal de Siri, como asistente virtual dedicado durante la conducción, está en que sus funciones no son intuitivas, y la interacción con el asistente virtual tiene un nivel excesivamente alto de complejidad, lo que en este estudio dio lugar a todo tipo de errores como llamadas a la persona equivocada. Por este tipo de motivos, David Strayer, al cargo del estudio, aseguró que «los coches pueden ser configurados para soportar los mensajes de texto, las llamadas de voz y los medios sociales, pero esto no quiere decir que vaya a ser seguro para nosotros.»