Los teléfonos móviles nos rodean y hoy en día resulta prácticamente imposible encontrar una persona que no use uno de estos terminales en su vida cotidiana. En apenas dos semanas dará comienzo el Mobile World Congress 2015 en Barcelona donde se presentarán las últimas novedades del sector. A pesar de su uso extendido, a lo largo de estos años diversos mitos y leyendas urbanas han acompañado a estos dispositivos y la mayoría de ellos no son como imaginamos.
Un móvil mojado se salva con arroz
Esta afirmación que seguro que hemos escuchado muchas veces, responde más a una medida desesperada que a otra cosa. Si por despiste o accidente hemos mojado nuestro teléfono móvil, “enterrarlo” en arroz no va a ayudar a salvarlo si el terminal no tiene la clasificación IP de resistencia a líquidos adecuada. No obstante, es cierto que en casos en los que el teléfono pueda haber estado sometido a una fuerte humedad, el uso del arroz podría ayudar eliminar su rastro, sin que esto garantice que no se haya visto afectado.
Usar tu móvil hará explotar una gasolinera
Una de esas leyendas que se han visto reforzadas en este caso por la propia legislación. Usar el móvil en una gasolinera no hará que esta explote, tal y como os comentamos tiempo atrás, puesto que para que se produzca un incendio o deflagración, es necesario que exista un combustible (el propio carburante), un elemento comburente (que puede ser el aire), y una chispa que dé inicio a la reacción química. Las radiaciones que emite un móvil al usarse hace que sea imposible que esto se produzca, aunque no obstante, es una actitud sancionable en España tras la entrada en vigor del Real Decreto 1428/2003, que advierte sobre este riesgo real que tiene en la electricidad estática a su principal enemigo.