Elegir un televisor no es sencillo y requiere que vayamos a la tienda con un mínimo de conocimientos para que el vendedor de turno no nos endose uno según sus necesidades. El televisor debe adaptarse a lo que necesitamos, a lo que queremos ver y a la habitación en la que lo vamos a colocar. Por todo ello, os ofrecemos una guía para comprar un televisor en 2015 y tener una buena base cuando nos hablen de pantallas curvas, UHD o Smart TV.
Tal y como hemos comentado en la introducción,
Resolución (UHD, 4K, Full HD o HD Ready)
Comenzamos hablando de la resolución, algo que condicionará mucho la elección y algunos parámetros de los que hablaremos en los siguientes apartados. En este apartado podemos encontramos bastantes siglas que pueden llegar a liarnos: HD Ready, Full HD, UHD, 4K… Lo más habitual en estos momentos es encontrar televisiones Full HD, cuya resolución nativa es de 1.920 por 1.080 píxeles o 1080p, aunque todavía se comercializan modelos HD Ready o lo que es lo mismo, 720p. Tampoco podemos olvidarnos del 4K o UHD, la ultra alta definición que está llegando con fuerza a nuestros hogares.
Una vez tengamos claro la distancia de visionado, es el momento de conocer las medidas recomendadas según resolución de la televisión. Existen muchos métodos rápidos para calcular la distancia en relación a las pulgadas, aunque muchos no tienen en cuenta que no es lo mismo hablar de HD Ready que hacerlo de UHD 4K. Por ello, esta calculadora online nos permite conocer las distancia según la resolución de la televisión y sus pulgadas. Para las medidas más comunes tenemos:
- 32 pulgadas – 1,4 metros (1080p) o 0,9 metros (UHD 4K)
- 42 pulgadas – 1,8 metros (1080p) o 1,2 metros (UHD 4K)
- 46 pulgadas– 2 metros (1080p) o 1,35 metros (UHD 4K)
- 55 pulgadas– 2,4 metros (1080p) o 1,60 metros (UHD 4K)
Para terminar este punto, remarcar que es posible que veáis u os hablen de SUHD. Se trata de una nomenclatura adoptada por algunos fabricantes que no implica ni cambio de formato ni de resolución, tan solo mejoras en la imagen a nivel de color, nitidez, contraste e inmersión.
Tecnología de la pantalla
Una vez hemos visto las resoluciones y pulgadas necesarias, el siguiente paso es escoger la tecnología de la pantalla. Seguro que os suena eso de LCD, LED o plasma pero la realidad es que tenemos mucho más que aprender sobre cada una de estas tecnologías de pantalla:
- LCD: La gran evolución con respecto a los televisores de tubos de rayos catódicos llego con el LCD o Liquid Crystal Display. Este tipo de pantallas están formadas por píxeles colocados sobre una fuente de luz, lo que permite reproducir los diferentes colores de la imagen. Según la corriente eléctrica aplicada a estos píxeles, pasará más o menos luz y se generará un color determinado.
- LED: En realidad es la misma tecnología que el LCD pero utiliza como fuente de luz los LED. Tenemos dos variantes conocidas como Edge LED o Full LED, según la colocación de la luz en la pantalla. Como ventaja sobre el LCD tradicional tenemos que su consumo es menor y su luz más uniforme durante toda la vida útil de aparato. Se trata de lo más común hoy en día.
- Plasma: Sin duda la tecnología plasma es la que mejor representación de los colores ha logrado, sobre todo cuando hablamos de los negros. Aunque los principales fabricantes abandonarán su producción muy pronto, siempre ha sido la elección favorita de muchos s. En su interior, un de plasma alberga un número de celdas que contienen una serie de gases como el neón o el xenón que con la corriente eléctrica comienzan a generar luz.
- OLED: Podríamos decir que es el siguiente paso de la tecnología LCD cuyas siglas quieren decir Organic Light-Emitting Diode. Utilizan diodos orgánicos de emisión de luz que son capaces de emitirla de forma autónoma. Sus ventajas pasan por ser más delgados y flexibles, mas económicos de fabricar cuando se estandarice la tecnología, menor consumo y mejor brillo y contraste. Algunos fabricantes ya han lanzado modelos con esta tecnología pero aún es raro verlos en muchas tiendas.
- 3D activo: en este caso, las gafas incorporan su propia electrónica que es la encargada de sincronizar la imagen y mostrarla correctamente. La televisión muestra imágenes para un ojo y para el otro de forma separada y las gafas le dicen a cada ojo lo que tiene que ver. El hecho de contar con electrónica propia hace que el precio de las gafas activas sea más alto que las pasivas.
- 3D pasivo: en cuanto a este tipo de tecnología, fusiona las dos imágenes que se muestran en la televisión de forma simultánea, ya sea en las líneas pares e impares. Las gafas polarizadas utilizan cristales diferentes para cada ojo para lograr el efecto tridimensional. Al contrario que las gafas activas, su precio es bastante bajo.
Curvado vs plano
Si habéis dado una vuelta por una tienda o sección de tecnología de una gran superficie, habréis notado que se venden algunos televisores con pantalla curvada. Se trata de una nueva apuesta del sector que promete mejoras con respecto a los modelos planos tradicionales. Los fabricantes nos explican que añadiendo una ligera curvatura a la pantalla se consigue activar nuestra vista periférica y se logra que percibamos las imágenes como si estuviéramos en el cine. Defienden que el movimiento en las escenas es más natural y que permite un efecto inmersivo sin necesidad de gafas. Algunos s lo ven como producto de marketing mientras otros defienden su utilidad real, lo mejor es comprobarlo por uno mismo.
Smart TV: tipos y sistemas
Antes de repasar los diferentes tipos y sistemas de Smart TV es necesario que nos preguntemos hasta que punto lo necesitamos. Esto es debido a que podemos aligerar la factura de la compra de una nueva televisión y con una pequeña parte del ahorro comprar un dispositivo externo que haga esta función como puede ser Chromecast y otros sticks USB similares.
Hasta este año los fabricantes habían apostado por sistemas operativos algo descafeinados para sus Smart TV pero la cosa ha cambiado (y mucho) en 2015. Las apuestas son tan serias como Android, Tizen, Firefox o Web OS. Por marcas, tenemos a Sony con Android TV, Samsung con Tizen, LG con WebOS o Panasonic con Firefox.
- Web OS, la apuesta de LG por este sistema operativo buscar ser una pieza importante en la interconexión entre la televisión, el móvil o el coche. Permitirá una conectividad más rápida como guiño al desembarco del 4K. Incluye un menú rápido de a todas las funciones y buscará ofrecer facilidad, velocidad, muchas aplicaciones e integración perfecta con el smartphone.
- Tizen es el sistema elegido por Samsung para sus Smart TV lanzadas este año. De nuevo, la apuesta es la velocidad y la sencillez con funciones como Quick Connect para captar la señal del móvil cuando está cerca.
- Firefox OS lo encontraremos en los nuevos televisores de Panasonic con una interfaz limpia y vistosa basada en elementos web y estándares abiertos. Este sistema cuenta con el apoyo de compañías de mucho peso como Telefónica aunque en el terreno de los móviles no han terminado de funcionar demasiado bien.
- Android llega con fuerza a los televisores de la mano de empresas como Sony, que intentará devolver la grandeza a su gama de imagen después de algunos años superado por Samsung o LG. Eso de “los contenidos de tu smartphone en la pantalla grande” suena realmente bien pero no es lo único. Tendremos Google Cast, Búsqueda por voz o TV SideView.
Una vez repasados los principales aspectos que tenemos que tener claro a la hora de comprar un televisor ya estamos preparados para enfrentarnos a la difícil tarea de decantarnos por un modelo en concreto. Como recomendaciones generales:
- Tanto comprando en tienda física como online antepondremos nuestras necesidades a todo lo demás.
- El presupuesto es el presupuesto.
- No te dejes llevar sólo por como se ve “en la tienda” ya que los contenidos y ajustes están hechos a medida.
- Si vas a una tienda, lleva los deberes hechos y no te creas todo lo que te cuenten.
- La tele más grande no es siempre la mejor.