Elon Musk ha campado a sus anchas con Tesla en el sector del automovilismo apostando por los coches eléctricos y abandonando por completo los motores de combustión interna. Venden únicamente dos modelos, con baterías de 60, 75, 90 y 100 kWh para una autonomía de entre 407 y 613 km según el ciclo de homologación NEDC, y son los únicos que alcanzaban estas cifras. Pero al fin, durante el Salón del Automóvil de París 2016 un fabricante generalista ha hecho frente a estas cifras.
No son pocos los que han presentado sus prototipos de coche eléctrico con rangos de autonomía de 400, 500 o hasta 600 km, pero a la hora de la verdad en el mercado hay pocas opciones. Está el Renault ZOE, que recién renovado alcanza los 400 km de autonomía, está el BMW i3 que también se ha actualizado hace poco para alcanzar los 300 km y está el Nissan LEAF, que llegó algo antes en su última iteración para superar ligeramente los 200 km de autonomía. Rangos que, salvo en el caso del Renault ZOE –aún no a la venta-, limitan este tipo de modelos al ámbito urbano por cuestiones evidentes, e impiden viajar.
Los coches eléctricos ya alcanzan los 300 km de autonomía
Podríamos decir sin miedo a caer en el error que 300 km es la marca común del sector, o al menos la media. Es donde se ha colocado el BMW i3. Por debajo está el LEAF de Nissan como comentábamos, y bastante por encima el Renault ZOE, pero ¿con qué baterías consiguen estos rangos de autonomía?
- Nissan LEAF: 30 kWh – 200 km.
- BMW i3: 33 kWh 300 km.
- Renault ZOE: 41 kWh – 400 km.
Los datos anteriores son la capacidad de carga de la batería –en términos sencillos- y la autonomía según el ciclo de homologación NEDC, que evidentemente varía respecto a las cifras de autonomía en uso real, pero es una referencia importante en tanto que es el valor que se utiliza de forma generalizada entre los fabricantes. Y en las cifras anteriores nos encontramos con que a mayor capacidad, mayor autonomía, que a priori es como debería ser. Pero claro, hay que tener también en cuenta la masa del vehículo, su ‘peso’. Porque no es lo mismo mover 1.000 kg, que mover 1.500 kg. Pero hay que tener en cuenta también la aerodinámica, o más concretamente su coeficiente aerodinámico, porque la resistencia al aire supone un mayor consumo para el motor, luego un gasto más rápido de la batería.
Que tiemble el liderazgo de Tesla
Es evidente que, aunque el Opel Ampera-e es poco más que un Corsa de los actuales, su precio será bastante más elevado –no lo conocemos aún-, pero Tesla no puede ahora mismo, tampoco, presumir de precios. Y en definitiva, el resto de alternativas siguen teniendo precios mucho más altos que las opciones con motor de combustión interna, pero en parte este problema se debe a la falta de ayudas del Gobierno, que sí las hay, pero no tan potentes como las que sustentan a los modelos de combustión interna.
Y mientras tanto habrá quien piense ‘¿ya, pero el Tesla Model 3…?’. Pero la respuesta es tan sencilla como acceder a la página web de Tesla y ver que lo único que hay de este modelo son promesas y un pago por reserva de 1.000 libras. ¿Libras? Sí, libras… bueno, o euros, pero en ningún caso para conductores españoles, porque en nuestro país no está disponible, ni se le espera. Así que entre promesas de Elon Musk y prototipos de otros fabricantes, Opel ha adelantado a todos por la derecha con ‘un Corsa’, pero eléctrico, y con más autonomía que cualquier otro equivalente