La cámara de los teléfonos móviles va mejorando año tras año. 2015 fue el año en el que empezamos a ver cómo los ajustes manuales empezaban a llegar a las cámaras de nuestros terminales. Estas funciones habían estado reservadas hasta ahora a cámaras digitales de 200 euros para arriba, obteniendo los mejores resultados con las cámaras réflex.
Junto con procesadores compatibles con estas funciones manuales, han surgido una gran cantidad de aplicaciones para aprovechar estos controles manuales en la cámara, como Manual Camera, Cámara FV-5 y Open Camera, que es gratuita. Si no estás familiarizado con los ajustes manuales de las cámaras, es posible que te sientas abrumado ante tal cantidad de ajustes. Por ello, vamos a explicarte en qué consisten y cómo sacarles el máximo provecho para mejorar tus fotografías.
ISO
El ISO es la sensibilidad que tiene el sensor de nuestra cámara a la luz. Cuanto más bajo sea el número, menos sensible es el sensor a la luz. Cuanto más alto sea el valor, más sensible será a la luz, y menos tiempo tardará el móvil en hacer la foto a una misma exposición. El inconveniente de aumentar la sensibilidad ISO es que esto aumenta el ruido en la fotografía (visible como una especie de granulado que aparece en la misma).


Es importante encontrar un buen ajuste ISO a la hora de tomar una fotografía. En plena luz del día normalmente elegiremos un ISO bajo porque tenemos luz de sobra, pero en situaciones oscuras y de noche deberemos elegir un ISO algo más alto para compensar la falta de luz. Es mejor tener un poco de ruido en una foto antes que tener una foto movida. En la foto de abajo podemos comprobar la diferencia que provoca tener una ISO de 100 con 3.200, que es el máximo que soportan en la actualidad los móviles.
Velocidad de obturación
La velocidad del obturador es el tiempo que éste está abierto captando luz, y también se le suele llamar tiempo de exposición. Cuanto más tiempo esté abierto, más luz captará. En relación con el ISO, cuanto más tiempo esté abierto el obturador, más bajo podremos poner el nivel de ISO, reduciendo el ruido.
Con respecto a la exposición, este ajuste nos permite elegir si queremos que nuestras fotos tengan algo de más luz (sobreexposición) o menos luz (subexposición), medida desde -2 hasta +2. Si no conseguimos encontrar el punto adecuado de iluminación de una foto por la presencia de un claroscuro, podemos subexponerla para preservar algo más de detalle en la misma, o sobreexponerla si queremos guardar más información y retocarlas posteriormente. Para controlar la luz de la fotografía también podemos recurrir más cómodamente al control de obturador que comentábamos antes.
Balance de blancos
El balance de blancos controla la temperatura del color de la fotografía. Se mide en grados Kelvin, y un valor bajo representará un color muy frío (azulado), y un valor muy alto representará un color muy cálido (rojizo). Algunos móviles tienden a tomar fotografías muy cálidas en interiores y poco representativas del color real, por lo que reducirle la temperatura puede ser una buena idea.



Las cámaras de los móviles actuales permiten ajustar la temperatura del color entre los 2.300 Kelvin y los 7500 Kelvin. Un valor intermedio se sitúa entre los 4.500 y 6000 kelvin para la mayoría de situaciones. Un valor extremo en el que se necesite un tono cálido puede ser en zonas con colores muy azulados, como una pista de esquí. En el caso de que quieras retocar posteriormente el color, puedes tomar una fotografía en RAW, y editarlo posteriormente en el PC.
JPEG vs RAW y enfoque
La fotografía RAW era algo exclusivo de cámaras réflex o semiréflex hasta hace dos años. Una
Este modo no es recomendable para fotografías que requieran capturar un momento de manera rápida, ya que, al tomar tres fotografías, ésta tarde un poco más en hacerse. Yo personalmente suelo utilizarlo en casi todas las fotografías de paisajes que hago, ya que permite guardar mucha mayor información si estás disparando directamente en JPG.
En mi caso, para manejar todos los ajustes de la cámara con comodidad primero encuadro la foto que quiero tomar, y presiono el botón AE-L. Este botón (AE-L significa AutoExposure Lock) toma la información de la foto tal y como la tomaría si estuviera en modo automático. A partir de esos ajustes automáticos, decido qué parámetros modificar (poner un color un poco más cálido, o reducir ligeramente la exposición, por ejemplo).