Samsung es líder mundial en la fabricación de unidades SSD, y está liderando la transición a las memorias 3D-NAND. Esta transición está haciendo que el precio de las memorias sea bastante elevado porque no se puede hacer frente a su demanda. A pesar de esto, Samsung ya está trabajando en los Z-SSD.
Z-SSD: el arma de Samsung para luchar contra los SSD 3D Xpoint
Los Z-SSD utilizan un nuevo tipo de memoria NAND llamada Z-NAND, la cual Samsung ha conseguido desarrollar, junto con su correspondiente controlador. La compañía ya ha fabricado las primeras unidades, las cuales están siendo probadas a fondo para iniciar la producción a principios de 2018.
Las memorias Z-NAND son, básicamente, unas memorias que utilizan celdas de un único nivel (SLC, o single-level cell). Estas celdas se diferencian de las MLC (multinivel) en que no almacenan varios bits por celda, con lo cual tienen menor capacidad en el mismo espacio, pero mayor fiabilidad y velocidad. Así, se consiguen velocidades hasta 7 veces superiores a los SSD SATA tradicionales.
El objetivo principal de estas
Los SSD son más pequeños y consumen menos energía que los discos duros, y todo con una mayor velocidad de lectura y escritura. Si fiabilidad se suele poner en entredicho, pero la realidad es que la tasa de fallos es la misma que la de los discos duros. Esto genera recelo en los consumidores a la hora de utilizar sólo SSD sin disco duro, sobre todo porque los primeros son finitos, y una vez se agotan no es posible volver a escribir en ellos.
Por ello, la demanda de los SSD por grandes empresas tecnológicas para usarlos en sus servidores va a seguir creciendo, ya que ellos se pueden permitir hacer redundancia de datos y así protegerse ante un posible fallo de un SSD.