Una VPN o Red Privada Virtual es una herramienta muy útil para cualquiera que se conecte a Internet, ya que «abre» un túnel en el que viajan nuestros datos cifrados manteniéndonos más seguros y anónimos cuando estamos on-line.
En los últimos tiempos el interés por estos servicios ha crecido mucho, lo que no sorprende en el actual clima de vigilancia por parte de muchos gobiernos, grupos y organizaciones. Pero, ¿qué podemos hacer realmente con una VPN además de reforzar la seguridad a la hora de movernos por Internet? Pues a continuación vamos a repasar algunos casos en los que estas plataformas, de manera adicional, nos podrán ser de gran ayuda cuando nos movemos por la Red.
Evitar el rastreo de los ISPs
Los ISPs están cada vez más interesados en rastrear a sus clientes en muchas regiones, con lo que la preocupación va en aumento, más ahora ahora que algunos de estos están autorizados a vender los datos de sus s en determinados países; hablamos de su historial de navegación, datos de ubicación o uso de aplicaciones. Es por ello que para evitar en gran medida todo esto, una solución VPN instalada en todos los dispositivos, incluidos los teléfonos móviles, es una buena solución.
Compras on-line en otros países
En el caso de que viajemos al extranjero y queramos comprar algo a través de Internet para que nos llegue a casa cuando regresemos, lo habitual es que, al visitar la web correspondiente, más si se trata de un minorista, tan solo se pueda comprar desde el país de origen. Sin embargo, si usamos un VPN de nuestro país, podremos acceder a esa web como si estuviésemos presentes a nivel local y utilizar la cuenta de de manera convencional para poner la dirección de envío de casa, aunque estemos en otro país.
Transmisión de contenido bloqueado
El geobloqueo o restricción geográfica se refiere a cuando el contenido de Internet se bloquea basado en la ubicación del . Esto se hace a menudo en plataformas tipo Netflix o similares, por ejemplo, para que los s solo puedan acceder a los contenidos de su región. Es por todo ello que el uso de una plataforma VPN con servidores ubicados en el país apropiado, puedan resolver estos problemas.
Luchar contra los hackers
Es posible que sepamos de antemano que un firewall está diseñado para mantener a los atacantes maliciosos fuera de nuestra propia red doméstica y en muchas ocasiones se encuentra en el router, aunque por supuesto también podemos usar firewalls de software que protegen el dispositivo donde están funcionando.
Pues bien, los hackers pueden acceder a esta red a través de la dirección IP, pero debido a que una VPN nos conecta a un servidor externo y nos asigna una dirección IP diferente, cualquier ataque será dirigido contra el servidor VPN y no contra nuestra red doméstica. Por lo tanto estas plataformas VPN suponen efectivamente una capa adicional de defensa contra los temidos hackers y otros elementos maliciosos que podemos encontrar al navegar por Internet.