Los altavoces son una parte imprescindible de nuestra casa si queremos tener una buena experiencia de sonido, ya sea viendo películas, series, escuchando música o jugando a juegos. Por ello, vamos a analizar qué hemos de tener en cuenta para comprar un buen altavoz, qué tipos hay, y cuáles son los que mejor se adaptan a tus necesidades.
A la hora de elegir los altavoces, debemos tener en cuenta diversos factores. Entre ellos encontramos cuánto nos queremos gastar, dónde los vamos a poner, por dónde vamos a pasar los cables, cuánto espacio tenemos, cuánto volumen le podemos llegar a dar sin molestar, y qué tecnología de sonido necesitamos.
Altavoces de suelo
Estos altavoces, como su propio nombre indica, están diseñados para colocarlos directamente en el suelo. También se les conoce como altavoces de pie, y en ellos suele haber varios altavoces y uno o más tweeters que se encargan de los agudos. Si a eso le sumas un subwoofer, tienes una grandísima cobertura de todos los rangos de sonidos: agudos, medios y graves.
Donde más se suelen ver estos altavoces es en equipos de cine en casa, y probablemente son la mejor opción que puedes elegir para ver películas, series o escuchar música (aunque si eres un profesional, te convienen más los monitores de estudio, como veremos más abajo). El rango de precios es muy amplio, con modelos por algo menos de 100 euros o 200 euros, a otros que pueden valer cientos o, 1.000 o más de mil euros.
Con estos altavoces es posible incluso prescindir de subwoofer, aunque a cambio de ser más voluminosos. En cualesquiera de los casos, vas a necesitar un amplificador que sea capaz de nutrir estos altavoces de energía y sonido.
Altavoces de estantería
Este tipo de altavoces son una alternativa algo más barata que los de suelo, y además ocupando menos espacio. Se les puede considerar como los hermanos pequeños de los de suelo, y requieren una estantería o un soporte donde ponerlos. La mayoría de estos altavoces sólo tienen dos altavoces, siendo normalmente uno de ellos (el más pequeño) para los agudos. Aunque su calidad no es tan buena como la de los de suelo, sí que estaremos obteniendo una buena calidad con ellos.
La mayoría de estos altavoces requieren conectores XLR o TRS, por lo que necesitarás algo intermedio para conectarlo a tu ordenador o televisión. Su precio se sitúa en torno a 200 euros para algo de buena calidad.
Altavoces activos
Por último, tenemos altavoces que van autoalimentados y no requieren de amplificador. Suelen ser tanto cableados como inalámbricos, y algunos cuentan con funciones inteligente, como a Spotify. Muchos monitores de estudio son activos, como estos por 105 euros.
Conclusión: compra lo que se adapte a ti, a tu casa, y a tu presupuesto
En definitiva, lo importante es que fijes cuánto quieres gastarte, cómo es la habitación donde los vas a usar, qué funciones vas a priorizar (sonido Dolby Atmos, Bluetooth, etc), o si los prefieres con o sin cable. Establece un presupuesto, y decídete a buscar lo mejor que puedas comprar por ese precio.
Un amplificador te va a solucionar muchos problemas a la hora de enchufar varios dispositivos y altavoces, por lo que os recomendamos que sea lo que sea lo que compréis, tenga un amplificador. Mirad también en tiendas especializadas en sonido, pues las grandes superficies (incluido Amazon) suelen tener poca variedad. La mejor calidad la encontraréis en tiendas especializadas.