WhatsApp, que actualmente se encuentra probando la reproducción de vídeos en streaming dentro del propio chat al enviar enlaces, se está viendo afectada por una grave vulnerabilidad que abre la puerta a que cualquier persona pueda saltarse el cifrado de mensajes de WhataApp y editar mensajes, pudiendo llevarnos a engaños, estafas o noticias falsas.
FakesApp: una grave vulnerabilidad de WhatsApp permite cambiar el contenido de los mensajes
Así lo ha revelado la empresa de seguridad Check Point, con una vulnerabilidad que han bautizado como FakesApp, y que permite a un atacante modificar mensajes enviados en un grupo o una conversación privada. En concreto, la vulnerabilidad permite realizar tres ataques diferentes. La compañía ha emitido un vídeo donde podemos ver cómo funcionan.
El primero consiste en que se puede editar el mensaje de una persona para hacer ver al receptor que el emisor ha escrito cosas que en realidad no ha dicho.
El segundo permite citar un mensaje como respuesta a una conversación en grupo para que parezca que proviene de otro miembro del grupo, pero en realidad proviene de alguien que no forma parte de él, pudiendo dar a entender a los que el link es de fiar cuando no lo es.
El tercero y último permite enviar un mensaje a un miembro de un grupo para que parezca un mensaje grupal, pero en realidad sólo lo puede ver ese miembro. Sin embargo, la respuesta que escriba el receptor la podrán ver todos los del grupo.
Es particularmente curioso que JSON para ver los parámetros que se envían y manipularlos.
Afirman que, una vez capturan el tráfico «simplemente se lo envían a la extensión web que han creado para descifrar todo el tráfico de WhatsApp«. La compañía ha publicado la herramienta para ello en GitHub, y han detallado en su blog cómo se han conseguido saltar el cifrado usando para ello WhatsApp Web y las claves públicas y privadas que se generan con cada código QR. Además de descifrarlos, también pueden cifrarlos de nuevo a placer.
Desde Check Point nos aconsejan tener cuidado con el contenido que recibimos en WhatsApp, ya que la desinformación se propaga más rápido que la verdad, con vídeos y enlaces falsos y modificados para hacer creer al determinadas ideas. Por ello, es importante verificar los hechos antes de compartir un contenido. Otra alternativa es utilizar aplicaciones que sí son seguras, como Telegram o Signal.