Hasta hace poco, comprarse una cámara de fotos profesional implicaba irse a una réflex de marcas como Canon, Nikon, Sony, Panasonic, Pentax, etc. Todas las marcas hacían uso del sistema de espejo clásico usado en las cámaras réflex DSLR. Sin embargo, en los últimos años han surgido las cámaras sin espejo (mirrorless en inglés), que tienen una serie de ventajas e inconvenientes sobre las DSLR, y vamos a analizarlas todas.
DSLR vs mirrorless: el nuevo dilema a la hora de comprar una cámara
La primera cámara mirrorless fue lanzada por Panasonic en 2008 (la Lumix G1). Estas cámaras permiten intercambiar los objetivos al igual que la réflex, pero no cuentan con un complejo sistema de espejos en su interior. Esto hace que puedan ser más ligeras y compactas, pero a cambio se pierde el visor óptico de las réflex, pudiendo ver sólo las fotos que hacemos en la pantalla o en visores electrónicos.
El precio es un factor importante también en estas cámaras, donde Sony lleva claramente la delantera con las mejores mirrorless del mercado, y ofreciendo cámaras Full Frame por apenas un tercio del precio de sus competidores. Esto está haciendo que muchos profesionales se estén pasando a cámaras sin espejo, por lo que Canon y Nikon se han puesto las pilas para sacar sus cámaras. Nikon ya ha anunciado las Nikon Z6 y Z7, y Canon ha hecho lo mismo con la Canon EOS R.
Peso y dimensiones
El peso es una de las principales ventajas de las cajas de cámaras mirrorless. Las réflex son más voluminosas por lo que decíamos antes de lo complejo de sus mecanismos, mientras que las cámaras sin espejo capturan la luz directamente al sensor sin ese mecanismo al prescindir del visor óptico (de manera similar a lo que hace un móvil).
Duración de batería
Este es un punto donde claramente ganan las réflex. No sólo tienen baterías más grandes porque sus cuerpos son más grandes, sino que además son más eficientes a la hora de hacer fotos. Las cámaras mirrorless obligan a usar la pantalla, mientras que las réflex no tienen que tener el sensor activo captando la imagen, además de poder apagar la pantalla si queremos y poder seguir componiendo la foto.
Así, las DSLR permiten entre 600 y 800 disparos con una sola carga en la mayoría de casos, llegando incluso hasta 1.000 en algunos modelos, mientras que las mirrorless se quedan entre 300 o 400 disparos. Por ello, necesitamos baterías de repuesto. También podemos conectar baterías externas y cargar la cámara, lo que en realidad para largas sesiones de fotografía es incluso más cómodo. Por ejemplo, podemos poner una batería circular en la zapata superior con un adaptador para micrófonos.
Vídeo
Este es otro punto donde las mirrorless se están comiendo a las réflex. Aunque las réflex acercaron la grabación de vídeo HD y Full HD junto con la posibilidad de tomar grandes fotografías, las mirrorless ofrecen en su mayoría la posibilidad de grabar vídeo en 4K, e incluso a 60 FPS.
La grabación de vídeo en 4K es algo común en casi todas las cámaras sin espejo, y sólo está disponible en la gama más alta en las réflex (Canon sólo lo ofrece en la 5D Mark IV). Sony ofrece además cámaras como las A7S y A7SII optimizadas para grabar vídeo. Además, el enfoque de estas últimas es mejor, con una mejor visualización en directo. Por ello, no es de extrañar que cada vez más youtubers usen estas cámaras.
Calidad de imagen
La calidad de imagen la determina en gran parte el tamaño del sensor. Así, mientras estemos hablando de sensores del mismo tamaño, la calidad de imagen será la misma. Tanto las DSLR como las mirrorless ofrecen megapíxeles de sobra. Un sensor Full Frame nos dará una gran calidad de imagen en una DSLR y en una mirrorless, mientras que los APS-C también dan mucho juego y son más baratos. La clave es la calidad de la lente.
Precio
Que una cámara sin espejo sea más compacta y pequeña no la hace más barata. Cámaras como la Nikon D3400 o la Canon 200D son lo mejor que puedes comprar en relación calidad/precio por apenas 500 euros, con una gran variedad de funciones. Sin embargo, una cámara como la Sony Alpha A6300 también ofrece grandes resultados con un sensor también APS-C.
La cámara de Sony tiene menos batería, no tiene visor óptico, y tiene un menor rango de lentes entre las que elegir. Sin embargo, tiene un sensor de 24 MP con las otras dos que hemos mencionado, además de poder grabar vídeo en 4K.
Conclusión
En definitiva, elegir una u otra dependerá de las funciones que más vayas a utilizar y del tipo de uso. Para vídeo, está claro que las mirrorless que graban en 4K son mejores, además de ser más ligeras y compactas; mientras que si necesitas un gran rango de lentes no muy caras será mejor que optes por una réflex.
Si estás buscando no gastar mucho dinero en tu primera cámara, una réflex como la 200D o similar en el rango de precio de los 500 euros es la mejor opción porque puedes comprar objetivos baratos (como un Canon 50 mm f/1.8 por apenas 100 euros), además de tener multitud de rios. Sin embargo, si estás buscando una cámara Full Frame barata, las mirrorless te ofrecen opciones mucho más asequibles, como la Sony Alpha ILCE-7K con lente de 28-70 mm incluida por 911 euros.
De cara a los próximos años esto va a cambiar, y conforme vayan mejorando las mirrorless, las réflex puede que vayan tendiendo a desaparecer. Algunos expertos afirman que la transición de DSLR a mirrorless será similar a lo que ocurrió con las cámaras analógicas y las digitales. Sólo el tiempo lo dirá.