Microsoft es conocida por introducir actualizaciones con fallos en Windows 10. En la gran mayoría de ocasiones, cuando introducen uno nuevo, suelen tirar hacia delante y arreglarlo posteriormente en lugar de eliminar una actualización. Por desgracia, con el último parche sí que se han visto obligados a retirarlo por la cantidad de fallos y quejas.
Así lo ha anunciado Microsoft en las últimas horas, donde han retirado el parche KB4524244 que recibieron el pasado martes 11 de febrero todas las versiones del sistema operativo, incluyendo 1607, 1703, 1709, 1803, 1809, 1903 y 1909. Este parche arreglaba decenas de vulnerabilidades, pero estaba generando diversos problemas.
KB4524244: parche de Windows 10 con problemas
Entre ellos, había s a los que directamente no se les instalaba el parche. Y muchos de los que llegaban a instalarla se le rompía la función de “
Esto se conseguirá actualizando el sistema a WDDM 2.7 para añadir el “Hardware-accelerated GPU scheduling”, de manera que se mejorará el rendimiento, se reducirá el consumo de batería, y se reducirá la latencia.