Photoshop tiene muchas funciones que nos hacen fácil retocar imágenes, hacer montajes o diseños. Y es una de las herramientas más útiles si tienes una página web o un blog porque podrás optimizar las imágenes para poder reducir el peso sin perder calidad. Podemos hacerlo utilizando el menú de guardar para web en Photoshop sin recurrir a ninguna página web específica ni instalar nada más.
Aunque no es la única herramienta que lo permite, si tienes Adobe Photoshop en tu ordenador, puede ser la más efectiva y la más cómoda si quieres guardar para web. Sobre todo si es algo que haces continuamente y no quieres saturar tu página o tu blog con contenidos pesados y no preparados. Por esto mismo, dentro de este software se puede encontrar la opción perfecta para realizar esta tarea en pocos pasos.
¿Por qué guardar para web?
No podemos subir las imágenes que hacemos (fotografías o creaciones propias en programas como Photoshop o Lightroom) a una página web porque acabaríamos saturándola con un gran peso y haciendo que cargue lento. Por lo que es importante conocer qué motivos hay para realizar esta tarea.
Qué motivos hay para optimizar una imagen
Guardar para web es una opción o funcionalidad que nos permite Photoshop. Con ella se consigue optimizar la imagen para subirla a Internet sin que tenga demasiado peso. ¿Se pierde calidad? Sí, es lógico y evidente que se pierde algo de calidad si vamos a reducir desde una imagen de 5 MB a una imagen de 20 KB, pero conseguimos un equilibrio entre la calidad y el peso.
No es necesario utilizar este formato o “truco” si vamos a usar la imagen para uso personal o si vamos a almacenarla en el ordenador. Puede que así ahorres espacio, pero no es aconsejable que lo hagas cuando vas a retocar tus fotos porque perderás la calidad original. Está exclusivamente pensado para transferir archivos por correo electrónico si no te importa perder algo de calidad. O para subirlo a una web, un blog o un programa de diseño que requiera un peso manejable.
Si subimos las imágenes a una página web sin ningún tipo de compresión, el peso puede ser significativo, algo que puede acarrear algún que otro problema a la hora, sobre todo, de cargar la página web. Es decir, para el sistema es mucho más sencillo lanzar en la web imágenes que pesan poco que aquellas que pensar más, sobre todo si son muchas al mismo tiempo. No es que estemos minutos esperando por ver las fotos de un artículo, pero sí que queda bastante mal estar leyendo, por ejemplo, sobre un tutorial y que la imagen que nos explica ese paso en concreto, aún no se haya cargado o este haciéndolo con mucha lentitud.
¿Se pierde mucha calidad?
Depende. Lo que se debe tener en cuenta es que uno de los problemas que nos puede ocurrir si no utilizamos este sistema, es que podemos conseguir una imagen que pese menos. Aunque, a costa de la calidad de la misma.
Cuando ponemos una imagen en una web, queremos que pese poco, pero también que la persona que la ve se sienta a gusto y no que vea una imagen distorsionada donde no entienda que sale realmente. Por eso es tan importante reducir las imágenes, pero conservando toda la calidad que sea posible.
Es por esto mismo por lo que hay que prestar atención a si la imagen final ya exportada se ve con la suficiente calidad o si hay que optimizarla de otra manera para que pese algo menos y tenga más calidad. Por lo que hay que prestar mucha atención a este tipo de detalles para no subir fotografías de mala resolución que no aporten nada a la página web.
Guardar imagen para web en Photoshop
Para guardar para web en Photoshop simplemente abre la imagen que quieras en el programa y prepárala para guardar. Cuando esté preparada para guardar, tendremos que ir a “Guardar para web…” Dependerá de la versión que tengas de Photoshop, la encontraremos en el menú directamente o tendremos que seguir algunos pasos más (en las versiones más recientes de Photoshop) pero la ruta siempre será muy parecida, independientemente de la versión que tengas.
Desde la barra de tareas
Una vez que hayas iniciado este programa en tu ordenador, deberás seguir los siguientes pasos desde la herramienta de edición de imágenes:
- Ve a la esquina superior izquierda de la pantalla.
- Toca en Archivo y se abrirán las opciones disponibles.
- Ve hasta “Exportar”.
- Elige “Guardar para web…”.
Puede que no tengas que abrir, exportar según tu versión de Photoshop y que directamente encuentres la opción “Guardar para web” al tocar en “Archivo”. Por lo que es algo que debes comprobar directamente en la barra de tareas dentro de la pestaña de Archivo.
Si el resultado no te convence, puedes tocar en Archivo > Guardar como. Deberás poner el nombre del archivo y el tipo, que por lo general será JPG. Una vez hecho esto, te aparecerá una pequeña ventana en la que podrás configurar a tu medida la calidad de la fotografía. En función de esta, el archivo pesará más o menos. Por lo que puedes jugar con este menú en concreto para encontrar el tamaño ideal.
Con comando
Una de las formas más cómodas y útiles de guardar sin necesidad de seguir los pasos anteriores es utilizar el atajo para Photoshop o el comando. Adobe nos permite utilizar las teclas o las combinaciones de estas para ejecutar acciones. Como, por ejemplo, para guardar para web. Simplemente, tienes que hacer lo siguiente:
- Presiona cuatro teclas a la vez en tu teclado: Alt+Mayus+Ctrl+S.
- Al pulsar sobre las cuatro teclas, abrirás las opciones y ajustes de guardar para web que veremos en próximos párrafos.
A partir de aquí, encontrarás la misma ventana que puedes ver al seguir los pasos del proceso anterior desde la barra de tareas de esta herramienta de edición. Únicamente cambia la vía de , ya que se da más facilidad a los s para que pierdan el menor tiempo posible en guardar una foto para web desde Photoshop.
Opciones y herramientas
Una vez que hayamos seguido los pasos anteriores nos llevarán todos a la misma ventana: la ventana de Guardar para web en Photoshop. Aquí veremos ajustes de calidad, formato, tamaño de la imagen, porcentaje… Lo primero en lo que nos vamos a fijar es una vista previa del resultado final una vez que hayas reducido su peso.
En la parte izquierda veremos algunas herramientas que permiten acercarnos o alejarnos para ver los detalles o acercar la vista si queremos hacernos una idea más fiable o concreta sobre cómo queda la imagen optimizada a medida que modificamos los parámetros. También veremos el tamaño o peso en ese momento que se irá modificando a medida que vayamos bajando la calidad de la foto.
Optimización y copias
En la parte superior también tenemos cuatro opciones: Original, optimizado, 2 copias y 4 copias. Al tocar sobre 2 copias podemos ver cómo era la imagen y cómo quedaría tras la optimización. Si tocas en “4 copias” verás cuatro opciones diferentes de modificación. En el caso de la imagen de ejemplo, veríamos el resultado con un peso de 68,7 MB, con un peso de 3,095 MB, con un peso de 1,721 MB y un peso de 1,414 MB para que nos hagamos una idea.
Ajustes
En la parte de la derecha tenemos los ajustes donde podemos elegir el formato de la imagen, la calidad, el tamaño, etc. En la parte superior, lo primero que elegimos es el formato: JPEG (el más habitual), GIF, PNG o WMBP. También podemos elegir la calidad con un control deslizante desde 0 a 100. A menor número, más compresión y más se notarán los píxeles en la imagen. Lo más común es que marques un valor de calidad “30” o Mediana en el desplegable, que conseguirás un equilibrio entre peso y resultado final sin que se estropee demasiado.
También aquí podemos elegir “Convertir sRGB” si queremos que sea compatible con la mayoría de la información y podemos decidir si queremos mostrar los metadatatos o no. En ese caso, desde “Metadatos” puedes abrir un menú desplegable con:
- Ninguno
- Copyright
- Información de copyright y de o
- Todo excepto información de la cámara
- Todo
Verás que el formato es el que quieres y también el tamaño y el peso se habrá reducido notablemente, por lo que no sufrirás retrasos al cargar tu página web.
Problemas intentando guardar para web
La función Guardar para web de Photoshop ha gozado de un importante volumen de popularidad a lo largo de los años, pero Adobe ha ido dependiendo cada vez menos de esta función. Lo ha hecho con la intención de redirigir el uso de este tipo de herramienta al propio sistema de guardado principal del programa.
Por lo tanto, es posible que te hayas encontrado con que, en tu versión de Adobe, sobre todo después de una actualización, ya no puedes guardar para web. La opción quizá no se visualiza en la interfaz y, al mismo tiempo, es probable que el comando que te hemos explicado antes ya no funcione. Aunque puedes intentar otros sistemas para acceder al guardado para web, es posible que puedas conseguir los mismos resultados si, simplemente, usas el botón de Exportar.
Una vez hayas pulsado en Exportar, elige la opción Guardar para web (legado). ¿Y qué puedes hacer si esta opción tampoco aparece? Lo ideal sería que recurrieras al reinicio de las opciones y ajustes de Photoshop para ver si así se soluciona el problema. De todas formas, si vas a hacerlo, ten en cuenta la recomendación de, primero, hacer una copia de seguridad de todas las opciones que tengas configuradas. Normalmente Photoshop es un programa muy personalizable y no queremos que, cuando se reinicie, te encuentres con que los usos habituales que haces del software ya no están configurados.
Otras veces, los problemas pueden estar atribuidos al propio archivo, así que sería recomendable probar con uno distinto. Y, tal como cuentan algunos s, una opción alternativa para buscar la solución se encontraría en reiniciar el programa. Hay quien comenta que, después de varios reinicios, consiguen que la opción de Guardar para web vuelva a aparecer. Eso sí, ten en cuenta que, tratándose de una función legado, su desaparición se podría producir en cualquier momento.
¿Hay otras maneras de optimizar la foto?
Si quieres reducir el peso de una imagen, no solo tenemos Photoshop para optimizarlas. Si no tienes el programa de Adobe, puedes acceder a algunas páginas webs gratuitas que se encargan de comprimir u optimizar imágenes en PNG o JPEG. Lo que hacen, como en el caso del software de fotografía, es reducir su peso, pero manteniendo lo mejor posible su tamaño. Hay muchas webs que permiten subir las fotos y tenerlas listas en un segundo de forma automática, sin tocar nada.
- Tiny PNG
Tiny PNG aquí es una de esas webs que permite subir hasta 20 imágenes diferentes con un máximo de 5 MB cada una para reducir el tamaño de todas. Podemos descargarlas una a una, todas a la vez, o transferirlas a Dropbox. Utiliza una compresión inteligente que disminuye el número de colores utilizados y promete una reducción de hasta el 70% de la imagen, pero sin perder calidad.
- Squoosh
Squoosh es otra página web que cumple la misma función que Tiny PNG es Squoosh aunque aquí tenemos un deslizante muy llamativo que nos permite ver cómo estaba antes la fotografía o cómo queda ahora. Soporte JPG; PNG, WebP y otros formatos y puedes reducir el peso fácilmente en un par de toques. Funciona de forma offline una vez que ya la has usado previamente online, por lo que siempre puedes tenerla a mano.