Aunque las multas por consumo de sustancias estupefacientes o por exceso de velocidad son las más comunes, hoy se dan en diferentes puntos del panorama nacional una serie de situaciones que son motivo de sanción y probablemente lo desconozcas. Entre ellas, por ejemplo, la acción de abrir mal la puerta del coche, la cual puede conllevar multas de más de 200 euros.
Hay multas que suponen importantes sustos…
Según la normativa, circular con los neumáticos gastados puede suponer una multa de hasta 200 euros por neumático. Son un riesgo para el conductor y para el resto de vehículos que circulen por cualquier vía. Si la profundidad de las ranuras es inferior a 4 milímetros, esta perderá adherencia.
Esta, por ejemplo, es una situación bastante común dentro de las tantas posibilidades que nos podemos encontrar a la hora de hacer uso de nuestro vehículo. Sin embargo, hay multas y sanciones de las que, si no estamos atentos, podemos llevarnos un importante susto que, a priori, sabemos que podemos evitárnosla.
En concreto, esto tiene que ver directamente con la acción de abrir la puerta, pero sobre todo con el error que cometemos mucho y que a veces lo hacemos más veces de lo que nos damos cuenta: se trata de hacerlo sin mirar, especialmente en situaciones de carretera o en lugares de mucho tráfico.
Si abres la puerta sin mirar, te expones a una sanción
Esta, como tal, es una mala práctica que se ha hecho casi costumbre, pero lo que no solo es que ahora estará penado, sino que lo hará de una forma más importante. Así, la Dirección General de Tráfico ya avisa de que abrir la puerta del coche sin mirar pueden suponer multas de hasta 260 euros.
Una acción sancionable económicamente pero que no acarrea la
El método de ‘a la holandesa’ para minimizar los impactos
Pero también es verdad que existen técnicas que sí están permitidas y que nos pueden hacer porque evitemos estas posibles multas. De esta forma, y aunque muchos están acostumbrados a mirar por el retrovisor y, posteriormente, abrir la puerta del coche con la mano que está en su mismo lado, las autoridades dicen que lo mejor es hacer justo lo contrario.
Esta se trata del método de abrir la puerta ‘a la holandesa’, la cual consiste en abrir la puerta del coche con la mano contraria. Es decir, que si la puerta está situada al lado izquierdo, el conductor la abra con la mano derecha. Esto también se aplica al resto de s del vehículo.
Esta técnica, fundamentalmente, tiene como objetivo minimizar los impactos en caso de que la apertura de la puerta se produzca bien en medio de la vía pública. Esta puede resultar de un estacionamiento en batería en el que la circulación se mantenga por uno de los laterales o bien en una situación en la que el no pueda garantizar la seguridad del resto de conductores al salir del vehículo, lo que también puede acarrear sanciones económicas.