A medida que la popularidad del coche eléctrico ha progresado significativamente en la última década, también lo ha hecho su rendimiento, algunos logrando ser los más veloces e, incluso, postulando para ser más rápido que los convencionales. En 2011, el único a baterías rápido que se podía conseguir era el Tesla Roadster. Ahora, con la llegada de la revolución eléctrica, muchas marcas nuevas y fabricantes de automóviles tradicionales han sacado al mercado vehículos monumentales. A día de hoy, uno de ellos es el Rimac Nevera.
El Rimac Nevera es el eléctrico más rápido
Los vehículos eléctricos tienen la ventaja de que tienden a ser rápidos porque la potencia y el par máximos se entregan al pisar el acelerador. Es algo que no ocurre con los de combustión y eso ha supuesto una ventaja para los fabricantes de deportivos eléctricos.
Una posición muy favorable para algunos del segmento tiene que ver con el hoy se postula para ser el eléctrico más rápido del mundo… y que incluso supera a más de un deportivo con motor de combustión. Nos referimos, en este caso, al Rimac Nevera, un superdeportivo que ha ganado en popularidad en los últimos años.
De hecho, y como mencionamos, este tipo de vehículos entregan su potencia máxima al instante, y algunos modelos que se hacen para ser el más rápido del mundo rondan los 2.000 CV y aceleran mejor que los monoplazas de Fórmula 1. Un caso concreto se da con este Rimac Nevera, el más conocido.
Cómo es
El originario de esta proeza es el fabricante Rimac Automobili, de origen croata, que lanzó al mundo el Rimac Nevera. ¿Qué tiene de especial? Pues que se trata de un hiperdeportivo totalmente eléctrico, que roza los 2.000 CV, tarda 1,85 segundos en pasar de 0 a 100 km/h… y cuesta dos millones de euros.
Los motores cuentan con un paquete de baterías de litio-manganeso-níquel con refrigeración líquida de 120 kWh, una tecnología creada por la misma Rimac. En términos de rendimiento, el Nevera puede pasar de 0 a 100 km/h en 1,9 segundos, alcanzar los 300 km/h desde parado en 9,3 segundos, completar el ¼ de milla en 8,6 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 412 km/h; por algo se le nombra como el coche eléctrico más rápido del mundo…
Por otro lado, también presenta hasta siete modos de conducción diferentes para ajustar el comportamiento y el rendimiento del vehículo: Sport, Drift, Comfort, Range, Track y dos modos personalizados.