El auge del patinete eléctrico, comprendido dentro del grupo de Vehículos de Movilidad Personal (VMP) no solo ha puesto sobre la mesa el factor de la siniestralidad y las lesiones graves, si no el de la propia seguridad del vehículo. Por ello, hay aspectos tan importantes que lo señalan, entre ellos sus baterías, las cuales pueden explotar y originar un incendio en nuestro patinete. Pero, ¿cuáles son las precauciones a tomar para evitar esta situación?
Su batería, principal fuente de incendio
Los patinetes eléctricos se han convertido en los grandes protagonistas de la movilidad urbana. Además de sus ventajas como medio de transporte, hay que tener algunas precauciones con su uso y mantenimiento, ya que pueden generar incendios debido a un mantenimiento inadecuado, golpes y altas temperaturas.
Esto se debe principalmente a que funcionan con baterías ion-litio, de poca autonomía y que han de ser recargadas continuamente en el hogar, momento en el cual se produce accidentes de este tipo porque pueden llegar a explotar.
De la misma forma, en la mayoría de incendios que se han producido en los últimos tiempos hay algo que tienen en común todos: el problema comenzó en la batería y fundamentalmente durante la carga. Como consecuencia, en algunos casos se produjo una explosión. En este sentido, la mejor recomendación es desenchufar el cargador si no estamos cargando nuestros dispositivos. Pero, ¿qué otras sugerencias hay?
Qué medidas hay
Puede parecer que sí, pero en el ámbito de la nueva movilidad a la que nos enfrentamos hay una cuestión que no debemos dejar de lado; y es sí, el
Límpialo con un paño y agua (nunca a presión)
Este es un consejo que se volverá muy útil para el resto de tus días con tu patinete eléctrico, evitando cualquier incendio u otro riesgo. Con todo, es importante no limpiar el vehículo con agua a presión. Esto es porque el agua podría introducirse en las celdas de la batería, ocasionando un cortocircuito. Además, es recomendable no cargar el patinete si está mojado o hay humedad.
En el caso de su limpieza diaria, lo más sencillo es lo más efectivo; llenaremos un cubo con agua limpia, mojaremos un paño de microfibra, lo escurriremos, y lo pasaremos por las zonas sucias del patinete, enjuagando de vez en cuando para limpiarlo. Con cuidado, podremos limpiar el manillar, el asiento, la tabla, la carrocería, etc., sin necesitar nada más que agua.
Es importante recordar que se trata de un aparato eléctrico, y que por tanto debemos evitar ahogarlo en agua. Es decir, que usaremos un paño húmedo escurrido (no un trapo demasiado mojado), pero nunca le daremos un manguerazo, ni lo sumergiremos en agua.