Las 7 multas más estúpidas que te pueden poner conduciendo: ¡hasta 500 euros!

Hay multas que todos conocemos y de las que somos conscientes cada vez que nos ponemos al volante al conducir nuestro coche. En nuestro día a día conocemos, por ejemplo, donde están los radares de velocidad o de tramo. Seguro que también respetas normas tan básicas como no conducir si has bebido o utilizar siempre el cinturón de seguridad. Sin embargo, hay sanciones que pueden ser sorprendentes y que incluso rozan lo incomprensible. ¿Sabes cuáles son las más extrañas o estúpidas que te pueden pasar en la carretera?
Hay multas rocambolescas al conducir, pero son legales
Que nos pongan una multa no es un plato de buen gusto, más aún cuando los motivos que justifican esa sanción son tan rocambolescos como algunos de los ejemplos que te vamos a presentar a continuación. Porque sí; estamos acostumbrados a ver sanciones de todo tipo, pero ya te adelantamos que después de esta publicación habrá ciertas acciones y lugares que verás de otro modo vaya que algún agente más estricto de lo normal se acerque a ti para entregarte las tan temidas multas al conducir.
En todo caso debes saber que, por muy absurdas que puedan parecer estas multas que verás y que te pueden poner al conducir, todas ellas son absolutamente legales. Es decir; que por muy insensatas que puedan parecer, están formuladas bajo el criterio de la Ley de Tráfico, por lo que si están ahí es porque alguna vez han sido planteadas para luego ser elaboradas.
La lista de las acciones que pueden ser representativas de sanción al volante es tan larga como la imaginación del agente que te pare para aplicar el reglamento o del desconocimiento de la norma por parte del conductor. De todos modos, que sean de este grado no quieren decir que no lleven multa, todo lo contrario. Tanto, que en muchos casos pueden hacer un roto a nuestro bolsillo.
Infracciones más absurdas
Puestos a denunciar en España, el sambenito no se lo quita nadie a la DGT, que hace de esta tarea uno de sus métodos para educar a los conductores. Pero ahí están los Ayuntamientos, con una maquinaria sancionadora que también les ayuda a engordar unas arcas públicas bastante endeudadas en no pocos casos (como en las
Si tienes el coche sucio, cuidado…
Esta es una de las multas al conducir que cualquiera pensaría que están para recaudar, aunque si lo pensamos tiene su lógica. Y es que en este sentido no se dan en relación a la carrocería o las ruedas, sino a los cristales, los faros y la matrícula de nuestro vehículo. Un coche que, según el Reglamento General de Circulación, no pueden ir sucios, ni rotos, ni con nieve o hielo.
Tanto el parabrisas como el resto de los cristales del coche tienen como función principal ofrecernos una correcta visibilidad al volante. El 90% de la información que recibimos al volante nos llega a través de los ojos, así que parece lógico pensar que estos deben estar en buen estado de conservación. Y lo mismo ocurre con las luces o la matrícula. En este caso, si conducimos con una capa de suciedad que dificulta nuestra visibilidad, la sanción por llevar estos elementos del vehículo sucios puede alcanzar los 200 euros sin pérdida de puntos.