El sueño de abandonar la Tierra y vivir en el espacio, ya sea colonizando la Luna, Marte o cualquier otro lugar que los astrónomos encuentren en el futuro, es recurrente. Pero la pregunta que se han hecho los científicos ha sido descubrir qué puede influir realmente, de una manera realista, en que esto sea viable o no. ¿Cuál es la condición que debemos cumplir para vivir en otro planeta?
Los expertos hablan de la Gran migración que se podría producir entre la humanidad si llega un momento en el que vivir en la Tierra sea demasiado inestable. Para que eso llegue, antes habrá que conseguir resolver las cuestiones más técnicas, aquellas que quizá llevan a que la fantasía de vivir en el espacio sea un poco más complicada de conseguir.
Las bacterias intestinales son la clave
Como decíamos, son muchos factores los que acabarán influyendo en la forma en la que se desarrolle la vida en el espacio. Pero se cree que, muchos de ellos, son superables de una u otra manera. No obstante, hay algo que preocupa de forma considerable a los científicos: el microbioma. O, dicho de otra manera, la presencia de las bacterias intestinales dentro de nuestro cuerpo, las cuales no llegamos a ver, pero que tienen una importancia fundamental en nuestra vida.
Para investigar sobre ello, un grupo de expertos de distintas universidades y centros, han realizado un trabajo exhaustivo con el que descubrir lo que pasaría con ellas. Porque estas bacterias que forman el microbioma son fundamentales para la vida y, entre ellas, se ocupan de distintos procesos y responsabilidades. Es necesario que funcionen y hagan su trabajo, que reduzcan las toxinas o que ayuden al organismo cuando se encuentra con elementos adversos.
Hay mucho trabajo que hacer
Además, y esto va a impactar de una manera bastante contundente en el mundo de la astronomía, dicen que debería introducirse un nuevo requisito para los astronautas. Se trataría de la capacidad de adaptación a la radiación que tiene cada uno de estos profesionales. Para descubrir cuál sería el nivel de cada uno, lo que se propone en el estudio es realizar pruebas citogenéticas con bajas dosis de radiación que ayuden a demostrar si serían los mejores candidatos para ir al espacio.
Eso podría implicar que, en un hipotético futuro en el que la humanidad tenga que trasladarse a otro planeta u otro lugar del espacio para continuar con su existencia, solo algunas personas puedan conseguirlo sin sufrir problemas de salud. O quizá se convierta en un factor que determine quién sería elegido para ese viaje. No obstante, todo esto ya entra en el campo de la ciencia ficción, por lo que no saquemos conclusiones precipitadas.