Ni la gorra ni el ventilador de mano, el rio más importante del verano son las gafas de sol. Y, teniendo en cuenta la temperatura, lo más probable es que ya estés mirando modelos entre los que elegir. ¡Pero espera! Es necesario que sepas que hay importantes diferencias dependiendo del color de cristal. Como te vamos a contar, no es lo mismo el cristal negro, el amarillo o el verde e incluso hay otros colores que deberías conocer.
¡Qué difícil es elegir unas gafas de sol! Antes todo era entrar en la óptica, probarte las gafas más chulas que encontraras, pagar y ponértelas. Pero ahora este tipo de rio ha mejorado mucho y es capaz de proporcionarnos un uso más específico según nuestras necesidades. Antes de elegir montura, asegúrate de que esté disponible el color de cristal que necesitas.
No elijas el color del cristal por una cuestión estética: hazlo porque es exactamente el que necesitas en función del uso que le vas a dar.
Negro
Este es el modelo más estándar y el que tiene un mayor volumen de ventas. Al mismo tiempo, también es el que ofrece una experiencia más generalizada y equilibrada. Lo puedes usar en cualquier tipo de actividad sin importar el tipo de iluminación que haya en el lugar donde te encuentres. Garantiza que, en la mayor parte de los casos, se mantengan los colores reales de lo que estás viendo a través de las gafas.
Protección a la radiación UV
Ahora que hemos visto toda la gama de colores que hay a tu alcance para que se adecue a tus necesidades y disfrutes de la mejor estética, hay que tener en cuenta un punto muy importante independientemente del color de cristales de gafas que elijas, porque es necesario que estos artilugios absorban el 100% de la radiación ultravioleta con el fin de proteger nuestros ojos y no tengamos secuelas oculares en un futuro.
Para ello, al comprar una gafas con el cristal del color que sean debemos informarnos en la óptica si integran el filtro UV400, que nos refugian de un 99% a un 100% de las radiaciones de rayos UVA y UVB, que pueden obtenerse tanto en las gafas graduadas de sol como en las no graduadas y suponen un plus para evitar cualquier problema de visión y cáncer en la piel que rodea el ojo. En teoría, todas las ópticas son establecimientos sanitarios y, por norma, deberían vender gafas que incluyan dicho certificado.
Teniendo como referencia lo que te hemos contado, ya habrás visto que el negro sigue siendo una opción perfecta. Además, recuerda que los amarillos se convierten en otra excelente opción si los vas a utilizar en actividades al aire libre o delante del ordenador. Así que ahora piensa qué tipo de cristal encaja mejor con lo que vayas a hacer mientras usas las gafas y ¡ya podrás elegir una montura con la seguridad de que quedarás satisfecho!