Ahora que las ventas de iPhone han comenzado a flojear y que Apple ve que el mercado está comenzando a perder un poco de interés sobre su dispositivo, la empresa de la manzana recurre a una carta que tenían bajo la manga. Y no es otra cosa que atacar a la venta de terminales de segunda mano.
Cuando se le ven las orejas al lobo, empieza a ser necesario tomar decisiones drásticas. Apple lleva años y años vendiendo el iPhone en sus distintas versiones, pero es ahora cuando sale al paso con la
A continuación, toca comprobar que la batería está en buen estado. Dicen «Comprueba que la batería está en su capacidad máxima». ¡Pero Apple, eso tiene truco! Todo el mundo sabe que es casi imposible mantener la salud de la batería de un iPhone al 100% a largo plazo. Tal y como informan de ello en la guía de segunda mano, parece que si no está al máximo de su capacidad tiene que ser algo que te produzca rechazo.
El documento es interminable y no se queda ahí. Hay recomendaciones para comprobar todo lo que se te pueda ocurrir, desde la conexión WiFi hasta el micrófono, los altavoces, la cámara, los botones… Por el contrario, no hacen mucho hincapié en asegurarte de que el vendedor tenga buena reputación, que sea una tienda legal o cualquier otra cosa. Si tuviéramos que hacer todas esas comprobaciones que nos dicen antes de comprar el iPhone reacondicionado, sería tan pesado que preferiríamos comprar una unidad nueva y así quitarnos problemas de la cabeza. ¿Quizá sea eso lo que quiera Apple?