Una de las dudas que nos viene a la cabeza cuando contratamos un nuevo servicio con nuestra operadora es si el router que nos van a instalar será suficiente. También puede que, en ocasiones, nuestro router tenga cortes o fallos y pensemos que no es de buena calidad o que necesitamos cambiarlo por otro.
Aunque es verdad que podrías utilizar un router de cualquier marca que prefieras y sustituirlo por el que te instala tu operadora, tienes que saber que, en la mayoría de casos, es innecesario y no vas a conseguir un mejor servicio cambiando el router por otro que elijas tú.
Ventajas del router de la operadora
En primer lugar, es lógico hablar de la calidad del servicio que va a ofrecerte la operadora. Cada equipo que una operadora instala, está diseñado y configurado específicamente para que pueda funcionar de la mejor manera en su red. Los ingenieros y desarrolladores encargados de diseñar estos equipos, conocen la infraestructura de la red a la perfección, lo que hace que puedan configurar los routers para que tengan el mejor rendimiento posible, ofreciendo una conexión más estable y rápida.
Además, utilizar el router que te instala el técnico te asegura que sea totalmente compatible con los servicios que has contratado. En muchas ocasiones, estos routers vienen preconfigurados con algunos ajustes específicos para aprovechar al máximo la conexión a Internet y cambiar el router por otro de otra marca podría provocar problemas de compatibilidad y que tengas que hacer configuraciones adicionales, lo que podría afectar también a la calidad de la conexión.
dan la posibilidad de una configuración avanzada y permiten que los personalices al gusto. Aunque esto puede ser muy importante para aquellos a los que les encanta la tecnología y las redes, la mayoría de s no necesitan unos ajustes tan personalizados y con la configuración del router de la operadora, suele ser suficiente para un servicio adecuado y de calidad en la mayoría de los hogares.