La red 5G llegó prometiendo revolucionar la conectividad con mayor velocidad y menor latencia. Sin embargo, la veterana 4G todavía tiene mucho que ofrecer. Pese a que haya pasado mucho tiempo del lanzamiento de la última generación, aún hay s con móviles que no son compatibles y zonas a las que no llega dicha cobertura. La conexión 4G sigue siendo una opción clave para muchos y, en ADSLZone, te contamos sus ventajas.
Con el paso de los años, la red 4G ha demostrado ser una tecnología robusta, capaz de conectar a millones de s de manera estable y siendo lo suficientemente rápida. Navegar por Internet, ver vídeos en alta definición, usar las redes sociales o realizar videollamadas son algunas de las cosas que podemos hacer con los datos funcionando a dicha velocidad. Todo ello con una cobertura mucho más amplia que la que actualmente ofrece el 5G.
Si bien el 5G proporciona mejoras en cuanto a velocidad y latencia, aún no puede sobrevivir sin el 4G. Aunque cada vez hay menos áreas sin la quinta generación, existen pueblos a los que no ha llegado o lo han hecho a través de pocas operadoras. Eso se debe a que necesitan nueva infraestructura más costosa que no todas las marcas de telecomunicaciones se pueden permitir un despliegue rápido y completo.
Lo mejor del 4G frente al 5G
Más allá de que la cobertura del 4G es más amplia en España (y en todo el mundo), hay otros motivos por los que esta conectividad móvil sigue teniendo ventajas frente al 5G. Una de las características principales por las que la cuarta generación gana es la estabilidad. Esta versión anterior de conexión móvil permite el uso de datos cuando hay conglomeraciones de personas y el 5G falla.
Además, el 4G consume menos batería en la mayoría de dispositivos. Esta tecnología requiere menos recursos de procesamiento que la nueva generación y es una alternativa más asentada, por lo que los fabricantes saben cómo optimizar la autonomía para su consumo. La eficiencia energética es especialmente notoria en teléfonos inteligentes de gama media o baja con 5G o en localidades donde la señal de 5G es todavía muy débil y el móvil debe estar buscando constantemente una conexión estable.
No siempre que usamos 5G es 5G real
Aunque muchos móviles muestren arriba el icono del 5G cuando están conectados a los datos, no siempre estaremos navegando con dicha cobertura. En muchos casos, lo que la red está ofreciendo realmente es lo que se conoce como 5G NSA (Non-Standalone), que se apoya en la infraestructura 4G para funcionar.
Eso quiere decir que, aunque técnicamente sí que estamos conectados a una red 5G, la experiencia en cuanto velocidad, latencia y capacidad no dista mucho de lo que proporciona una buena conectividad 4G.
Cada vez son más los operadores que brindan el 5G SA (Standalone) que verdaderamente cumple con lo prometido con el 5G desde el principio. Sin embargo, su despliegue aún es muy limitado en la mayoría de municipios.
Dado que muchos seguimos acostumbrados al 4G, no deberías preocuparte si tu smartphone muestra que estás conectado a dicha cobertura. Lo más probable es que estés en una zona o pueblo donde la red 5G aún no haya llegado, pero apenas notarás grandes diferencias. El uso que hacemos de la quinta generación no dista mucho de la que hacemos de la veterana 4G. Es cuestión de tiempo que las operadoras terminen desplegando lo último en conexiones móviles realmente, pero, mientras tanto, la red existente es lo suficientemente veloz como para que sirva para casi cualquier tarea que quieras realizar con Internet.