Apenas unos días después de descubrirse una vulnerabilidad en procesadores de AMD, ahora Intel se ha visto afectada por otra grave vulnerabilidad en sus procesadores que, al igual que Meltdown y Spectre, supondrá una pérdida de rendimiento en los procesadores actuales si se instala el parche que las soluciona.
Ha sido Bitdefender quien ha encontrado esta nueva vulnerabilidad, la cual han bautizado como Load Value Injection (LVI), con código CVE-2020-0551 e Intel-SA-00334. El fallo permite inyectar y ejecutar código malicioso o remoto, y ser usada para obtener contraseñas o claves de cifrado, o básicamente tomar el control de todo lo que hace y ve el procesador. El fallo permite “darle la vuelta” a Meltdown, donde no sólo se puede usar para extraer datos, sino que puede usarse para insertar datos falsos en la memoria.
Por ello, los investigadores dicen que LVI es como un Meltdown a la inversa. Y, además, también es más peligroso que Meltdown y Spectre, ya que funciona en procesadores sin componentes de predicción o que ya tengan soluciones a nivel de hardware o software. En el siguiente vídeo podemos ver cómo funciona.
El ataque es complejo y, como decimos, requiere físico al ordenador, limitando su alcance, donde por ejemplo Meltdown sí podía aprovecharse a través de ejecutar código en el navegador del . Sin embargo, su peligrosidad aumenta porque Intel no ha lanzado ningún parche ni ninguna actualización de microcódigo para el mismo, aunque Intel lanzará actualizaciones para la plataforma SGX y el SDK, además de trabajar de manera conjunta con empresas como Microsoft para hacer que las protecciones del compilador y del ensamblador estén disponibles para protegerse ante LVI a nivel del sistema.
Rendimiento hasta 19 veces inferior
Los cambios en el compilador, por ejemplo, incluyendo soporte especial para modificar secuencias de instrucciones que combinan una operación de carga con un dependiente a la memoria o una operación de bifurcación. Dependiendo de las aplicaciones, la carga de procesamiento aumenta entre 2 y 19 veces cuando se mitiga por completo, según Bitdefender. E Intel no quiso confirmar si las cifras eran o no reales, y en su documento de divulgación sólo dicen que “el efecto dependerá de la carga, pero puede ser significativo en algunos casos”. Tanto es así que en el documento dicen que, si el impacto es muy grande, los fabricantes de software sólo lanzarán mitigaciones parciales para evitar destrozar el rendimiento del chip.
Así, esta es una de las vulnerabilidades más graves de todas las que ha sufrido Intel en los últimos dos años, ya que no sólo es peligrosa, sino que van a dejar a muchos s sin parches de seguridad que la subsanen por completo. Tendremos que esperar semanas o incluso meses para ver qué vulnerabilidades decide parchear Microsoft en Windows 10.