Cierre y condena millonaria para otro IPTV pirata con miles de canales gratis

La persecución contra el IPTV pirata es el pan nuestro de cada día. Constantemente se cierran servicios que ofrecen estos canales ilegales y, casi al mismo tiempo, surgen otros nuevos.
Sin embargo, cada vez se endurecen más las penas, tratando de crear un efecto disuasorio para que otros
My Indian TV era un servicio con una suscripción mensual de 15 dólares que daba a miles de canales de IPTV en calidad HD a través de navegadores, aplicaciones de iOS y Android y un add-on de Kodi. Estaba centrada en la emisión de canales con origen en India y Pakistán a clientes en Estados Unidos, violando las licencias exclusivas que DISH posee para todo el país.
Tras más de un año desde el comienzo de las acciones legales, un tribunal de Nueva York ha dictado sentencia en favor de DISH, imponiendo una sanción económica de 26,5 millones de dólares (26,8 millones de euros) a los dos responsables de My Indian TV: «son responsables directa y secundariamente de infringir los derechos exclusivos de DISH para distribuir y ejecutar los canales con licencia y los programas con derechos de autor incluidos».
El Tribunal determinó que los demandados capturaron los programas y los convirtieron a formatos «compatibles con Internet», los transmitieron a suscriptores en los Estados Unidos y ejecutaron y distribuyeron públicamente de manera ilegal el contenido protegido por derechos de autor.
DISH podría quedarse con las manos vacías
A pesar de que el Tribunal encontró a los demandados responsables conjunta y solidariamente por cada acto de infracción porque ellos “dirigieron, autorizaron, supervisaron o participaron personalmente y se beneficiaron económicamente de la conducta infractora”, DISH podría quedarse sin cobrar dicha multa tan jugosa.
DISH nombraba a Sanjeev Kumar y Tsvetomir Dobrilov como los supuestos operadores de My Indian TV y se otorgó permiso para ar a ambos por correo electrónico. Se notificó a ambos mediante el envío de un enlace a una carpeta de Dropbox, según las instrucciones del Tribunal.
No hay indicios de que hubiera una mejor manera de ar a los hombres o que DISH haya obtenido sus direcciones físicas desde entonces, donde sea que estén en el mundo. Este paradero desconocido plantea la pregunta de si los 26,5 millones en daños llegarán alguna vez a las arcas de la operadora demandante.