Max continúa con su camino hacia la redención reconociendo el error que cometieron con uno de sus próximos estrenos. La plataforma, con esta decisión, intenta reconducir la relación con sus suscriptores y que así se empiece a ver brillar su futura «retransformación» en HBO Max.
Desde Max se han tomado muchas decisiones malas. Su filosofía de cancelar películas para ahorrar en impuestos y así sanear las cuentas de Warner Bros. Discovery, por ejemplo, se han convertido en una preocupación entre los amantes del cine y el entretenimiento. Por suerte, la empresa lleva semanas demostrando que está dispuesta a encauzar su rumbo y a disfrutar de una gran armonía con los seguidores suscritos a Max.
Recapacitar es de sabios
Viajemos atrás en el tiempo y situémonos en el año 2021. En ese momento, Warner Bros. estaba trabajando en multitud de películas con las que satisfacer a los s de HBO Max. La plataforma venía de haber triunfado durante el tiempo de pandemia, puesto que sus grandes estrenos de cine, como Mortal Kombat o la última entrega de Matrix, se habían estrenado directamente en el servicio. Ambas películas llegaron en 2021 y, por supuesto, hicieron que quisiéramos suscribirnos a la plataforma con los ojos cerrados. Por ello, Warner quería producir más y más películas para su servicio de streaming.
Pero, poco después, el mercado del cine se fue recuperando y Warner Bros. Discovery vio que, quizá, habían apostado demasiado fuerte por su parrilla de estrenos. Fue entonces cuando, en 2021, se anunció que la película Looney Tunes: El día que la Tierra explotó llegaría directamente a HBO Max. Era otra de sus apuestas tal y como, en un margen de tiempo similar, también trabajaban en Batgirl. Aunque la película del universo de Batman quedó totalmente cancelada y desapareció incluso después de estar terminada, la aventura de los Looney Tunes corrió mejor suerte.
Es posible que, al final, Warner Bros. Discovery haya encontrado la fórmula para no tener que enterrar películas de las que han cambiado de opinión solo para pagar menos impuestos. No sabemos hasta qué punto les sale rentable, pero, en cualquier caso, es una gran noticia ver que estas películas se están salvando. Porque, aunque HBO Max ya no parece tener mucho interés en contenido infantil-familiar, es indudable que son miles de personas las que están interesada sen los Looney Tunes.