Mientras las plataformas de streaming siguen aportando aire fresco, en la TDT se viven cambios drásticos en algunos de sus canales. La búsqueda de identidad y el intento de probar nuevas ideas han llevado a situaciones inesperadas.
En los últimos meses la TDT, al menos algunos de sus canales, se han convertido en un hervidero. Y el motivo no es otro que el intento de mejorar en un entorno en el cual el streaming cada vez está empujando más a los canales de televisión. En ese contexto, RTVE, a través de La 1, ha sido protagonista de un viaje del cielo al infierno que ha levantado muchas ampollas.
La 1 se choca contra la realidad
Es difícil intentar recordar un tiempo anterior a este en el que La 1 no fuera La 1. Es decir, siempre hemos esperado una serie de contenidos bastante estandarizados y un estilo de programación en la cual no suele haber muchos elementos que sorprendan. Esto no significa que La 1 no haya tenido programas de éxito y que no haya acumulado unos niveles de audiencia masivos, pero es obvio que su estilo siempre ha sido distinto.
Todo cambió cuando RTVE tomó la decisión de fichar a David Broncano. El movimiento de “quitarle” el presentador y su programa a Movistar Plus+ tenía la intención de revolucionar la televisión en abierto. La hegemonía de la cual había disfrutado El Hormiguero durante años se podría terminar de una vez por todas gracias a la entrada del presentador. Y lo cierto es que, durante los primeros meses, funcionó. Pero, como incluso sus propios protagonistas avisaron que podía ocurrir, se trató de un espejismo. La montaña rusa llevó a que subieran mucho más rápidamente de lo que nadie habría imaginado. Subieron y subieron mientras, bajo una mirada objetiva y crítica, era fácil ver que las costuras del programa se tambaleaban. Pero el éxito no parecía terminar y las cifras de audiencia invitaban al optimismo.
Mientras tanto, otros canales de la TDT saben que hay victorias fáciles que pueden sumar a su historial de éxitos. Y esto nos lleva a ver una crisis de identidad distinta, una que no tiene que estar realmente vinculada a una mala sensación. Así, si bien RTVE decidió no entrar en la competición para comprar el partido de fútbol en abierto de cada semana de LaLiga EA Sports, otro canal Ten TV, sí ha querido hacer algo. Y, aunque no tendrán ese partido, sí que incluirán encuentros de LaLiga F, la liga de fútbol femenina. Además, no habría que descartar del todo que pueda llegar a tener más partidos, como los de la segunda división. Mientras tanto, alguien en RTVE es posible que se esté dando cabezazos contra la pared, puesto que conseguir el partido en abierto, el cual se ha terminado llevando DAZN, habría sido un éxito seguro para La 1.
Aprendiendo de los errores y de las victorias de otros canales, en RTVE van a tener que esforzarse para que su presencia en la TDT recupere toda su gloria. Pero está claro que no lo van a tener nada fácil.
Para ello, lo más probable es que no tarden en tomar más decisiones que puedan significar la vuelta de programas o espacios que habían quedado de lado a favor de las últimas innovaciones introducidas por la cadena pública. Tampoco sería de extrañar que, como ya están haciendo, aumenten su apuesta por el cine. Al fin y al cabo, eso acaba generando un beneficio directo no solo para La 1, sino también para RTVE Play.