Youtuber que pirateaba televisión va a la cárcel y la policía subasta su colección de coches

Conseguir hacer fortuna gracias a la piratería está claro que no es la más inteligente de las decisiones. Un famoso youtuber lo acaba de comprobar, puesto que no solo ha entrado en prisión, sino que, además, las autoridades han puesto en subasta su enorme y lujosa colección de coches.
Coleccionar coches era su pasión. Bill Omar Carrasquillo, más conocido en YouTube con el nombre de Omi In A Hellcat, ha sido protagonista de una de esas victorias que los agentes antipiratería disfrutan de principio a final. Y, como de costumbre, también se espera que sirva de ejemplo para otras personas que puedan llegar a plantearse este tipo de negocio ilegal.
Un imperio pirata destruido
Su faceta como youtuber no era lo que precisamente había llenado sus arcas. Contaba con una cantidad razonable de suscriptores, más de 800.000, pero de donde sacaba su gran fortuna era de la piratería. Las autoridades le han identificado como el líder de una gran red de piratería en la que infringía el copyright de la televisión por cable en Estados Unidos para sacar beneficio de distintas maneras. También se le ha condenado por fraude con dispositivos, lavado de dinero y otros delitos relacionados con la piratería debido a todo el contenido que robaba y compartía o vendía de varias formas. En la investigación se llegó a descubrir que amasó una fortuna de 30 millones de dólares.
https://www.youtube.com/watch?v=_UU7CUkSApU
En el rastro que siguieron los agentes encargados de la operación tuvieron mucho que ver los vídeos que Carrasquillo publicaba en YouTube, en los que claramente lucía una fortuna que no era propia de un canal como el suyo. Eso fue lo que primero encendió las alarmas y lo que motivó a los agentes a tirar del hilo hasta que tuvieron pruebas suficientes para sentenciarlo y meterlo en prisión durante cinco años.
Se va a quedar sin sus coches
El castigo que se ha impuesto al youtuber ha sido ejemplar. No solo tiene que pasar cinco años en la cárcel y perder todos los millones que había conseguido amasar, sino que, además, le han puesto una multa de 15 millones de dólares. Y, junto a los millones perdidos, también se va a quedar sin sus coches. En realidad, tal y como se comenta en la prensa especializada, los vehículos ya han comenzado a ser subastados.
Eso sí, las autoridades avisan en la subasta que son coches que proceden de un criminal y que, aunque se cree que la información que aportan en cada uno es correcta, podría haber alguna discrepancia. Nunca se sabe. Más allá de la curiosidad de la subasta de los coches, es obvio que la noticia no deja de ser un aviso a navegantes para que los piratas que todavía no han sido cazados se piensen el dejar de cometer los delitos que están llevando a cabo.