Actualmente, en nuestro ordenador tenemos o un SSD o un disco duro, o una combinación de ambos. Cada uno tienes sus ventajas para almacenar datos, donde un SSD es mucho más rápido, pero ofrece más problemas de durabilidad. Los discos duros son más fiables, y además el coste por giga es mucho menor. Sin embargo, hay un sistema de almacenamiento que es más barato, y que va a ser aún más barato próximamente: las cintas magnéticas.
Las cintas magnéticas fueron los primeros sistemas de almacenamiento de datos para ordenadores. A pesar de ser tan antiguas, éstas han ido evolucionando con el tiempo, y ofrecen una densidad de datos y un coste por bit muchísimo más barato que un disco duro o un SSD. Actualmente, el sistema usado es LTO (Linear Tape-Open).
Las cintas magnéticas son mejores para almacenar grandes cantidades de datos
La cintas tienen una velocidad de escritura y lectura más rápidas que las de un disco duro, ya que los datos se escriben y se leen de manera secuencial. Además, son más fiables y presentan menos errores de lectura que los discos duros, con una vida útil de media de 30 años.
No obstante, buscar datos concretos en ellas se hace más complicado, por lo que el sistema es mejor para copias de seguridad con pocos s, ya que además tras reescribir información en ellas más de 100 veces hace que empiecen a degradarse. También es muy sensibles a las condiciones de almacenaje, requiriendo temperaturas y humedades ideales en todo momento, además de recibir mantenimiento constante.
En el mundo, hay dos compañías que están combatiendo en el segmento de las cintas magnéticas: Sony y Fujifilm. Y ahora, Fujifilm ha anunciado que está trabajando en una cinta con 400 TB de capacidad, o 224 Gbit por pulgada cuadrada.
Este aumento en capacidad de almacenamiento dejará atrás a los discos duros y a los SSD, donde estos últimos alcanzaron los 100 TB en 2018 y desde entonces han dejado de crecer porque no tiene demasiado sentido almacenar tanta información en una única unidad en términos de coste y fiabilidad de datos.
Con ello, las cintas van encaminadas a convertirse en el primer medio de almacenamiento en alcanzar 1 petabyte por unidad. Con el aumento de la capacidad también se va mejorando la velocidad, y de momento habrá que esperar al año 2030 para encontrar cintas de tal densidad. Sony, por su parte, mostró en 2017 que iba lanzar para 2026 una unidad de 201 Gbit por pulgada cuadrada.