Seguro que, alguna vez, te has planteado si hay unas recomendaciones determinadas sobre las veces en las que hay que llevar a cabo el reinicio del ordenador. Porque no suele ser algo de lo cual el fabricante informe y siempre acaba quedando la duda. En cualquier caso, te vamos a echar una mano para que sepas si estás reiniciando tu ordenador demasiado poco o si, por el contrario, lo reinicias más de lo que deberías.
Pese a que durante los últimos años, la mayoría de los fabricantes de ordenadores han realizado interesantes avances en todo lo que tiene que ver con la eficiencia energética y la optimización de sus equipos, actualmente resulta imprescindible que, de vez en cuando, reiniciemos nuestro ordenador. Especialmente si hemos instalado un programa recientemente o, simplemente, si ha pasado mucho tiempo desde el último reinicio.
En ocasiones, es común que dejemos que pase el tiempo sin reiniciar hasta que llega alguna actualización importante de Windows que nos obliga a ello. Pero debes saber que no se trata de una buena decisión. Por mucha pereza que dé reiniciar y tener que abrir de nuevo tus programas favoritos, deberías reiniciar más habitualmente.
Una vez a la semana
Los expertos, primero de todo, determinan que resulta muy complicado llegar a una respuesta definitiva sobre el periodo ideal en el que deberías reiniciar tu ordenador. Argumentan que hay distintos factores que tienen relevancia y algunos de ellos hacen que sea muy difícil dar una respuesta global. Por ejemplo, dicen que, más allá del sistema operativo que tengas, lo más importante es el tipo de uso que hagas de tu ordenador. Por lo tanto, eso dificulta que se pueda hacer una recomendación precisa acerca del periodo que deberías esperar.
¿Es suficiente con dejar el PC en suspensión?
Una de las opciones más habituales por las que se decantan un mayor número de personas hace referencia a la posibilidad de suspender el PC en vez de apagarlo. Incluso en aquellos casos en los que estamos seguros de que no vamos a utilizar el ordenador durante varios días. A medida que la tecnología ha ido avanzando, ha permitido que durante la suspensión de nuestro portátil apenas se gaste la batería. Siendo una solución cada vez más utilizada.
No obstante, si optamos por esta vía de manera prolongada, es posible que la memoria no se restablezca de manera correcta y no sea posible recuperar su rendimiento normal tras la suspensión. Por lo que deberemos valorar el apagado como solución en estos casos.
Pero, ante todo, no olvides que reiniciar el ordenador es una forma de revitalizarlo y de dejar que respire un poco antes de ponerse a trabajar de nuevo. Es muy habitual que los equipos comiencen a ralentizarse o a sufrir problemas de rendimiento, como que las pestañas se abran más lentamente o que incluso las fotos que quieras ver no se carguen. Ese tipo de cosas no son problemas permanentes de tu ordenador debido a que este se haya quedado anticuado, sino que, por lo general, se solucionan rápidamente con solo reiniciar el PC. Por ello, te recomendamos que tengas muy en cuenta esa recomendación generalizada de reiniciar una vez a la semana.
Además, si sabemos que durante las próximas semanas no vamos a utilizarlo, porque tenemos algunos días libres en el trabajo o vamos a estar fuera de vacaciones, también podemos apagarlo y dejarlo descansar unos días. No tanto por el consumo energético con los que cuentan actualmente los ordenadores más modernos, sino por evitar que vaya acumulando horas de uso en momentos del año en los que no resulta necesario que esté encendido, como en las situaciones descritas previamente. Siguiendo estos consejos, e interiorizando estas pautas, seguro que todo va a funcionar mucho mejor a partir de ahora.