Este año todas las personas que tienen un Smartphone deben elegir entre disfrutar de una enorme velocidad en un espacio reducido de brechas de cobertura gracias al 5G o si conformarse con una cobertura y velocidades que son suficientes pero que ni si quiera son capaces de superar el 4G. Sin embargo, una nueva tecnología podría combinar las ventajas de ambas opciones para permitir la conectividad 5G sin sacrificar velocidad o confiablidad. Esta tecnología permite alcanzar una velocidad de 800 Mbps manteniendo el 100% de la fuerza de la señal.
Ha sido desarrollada por un grupo de ingenieros de la Universidad de California en San Diego, Estados Unidos. Los sistemas 5G de hoy en día transfieren datos a través de un rayo de onda milimétrica muy parecido a un láser desde y hacia una estación base y un receptor (en este caso, el receptor es nuestro teléfono móvil). Sin embargo, si algo se interpone entre dicho rayo, la conexión se bloquea de forma automática.
Dividir el rayo en varios, la clave
Confiar en un solo rayo provoca que solo pueda existir un punto de fallo. Por tanto, los ingenieros propusieron una solución que consistía en dividir el rayo de ondas milimétricas en varios, y cada uno tendría una trayectoria diferente desde la estación base hasta el receptor.
Así, al menos uno de los rayos podría llegar al receptor en caso de que los otros encontraran algún tipo de obstáculo durante el trayecto.
Lo mejor de todo es que este sistema se puede desarrollar con tecnología de comunicaciones que ya existe. Todos los algoritmos cumplen con los protocolos 5G actuales. Lo único que se necesita es una pequeña estación base equipada con una matriz en fase desarrollada en el laboratorio de la Universidad de San Diego.
Así pues, esto se trata de una nueva tecnología importante para el desarrollo de la red 5G. aun así, puede pasar un tiempo hasta que los diferentes operadores sean capaces de adaptar sus redes de banda alta para ejecutar soluciones como esta.