A Microsoft se le escapó recientemente una herramienta que, por ahora, no debería haber visto la luz de forma pública. Y aunque la empresa se puso manos a la obra para solucionar el error de inmediato, esto no ha impedido que los especialistas en Windows 11 encuentren la manera de utilizarla. Sigue leyendo y te explicamos qué tienes que hacer para poder acceder a funciones de tu sistema operativo que no deberían estar disponibles.
Es posible que hace poco leyeras acerca de la función StagingTool, la cual fue desvelada por Microsoft en un momento en el que todavía tendría que haber sido privada. En principio, todo se solucionó y esas funciones, conocidas como Moments, quedaron ocultas de nuevo. Pero ahora se ha llegado a descubrir qué hay que hacer para que puedas saciar tu curiosidad.
Buscando secretos
Algo con lo que no contaba Microsoft era con que tiene a miles de entusiastas de Windows 11 totalmente locos por encontrar aquello que está oculto. Y eso no es nuevo, sino que lleva ocurriendo durante muchos años. Lo cierto es que incluso hay herramientas que están diseñadas para poder zambullirse en el código de las versiones Insider y así tratar de encontrar aquello que los desarrolladores de Windows hayan dejado oculto.
Muchas de estas funciones solo son utilizadas por Microsoft y por sus desarrolladores en sesiones de trabajo o en distintos procesos. Otras sí que se podrían añadir públicamente en el futuro, pero no es algo que vaya a ocurrir con todas de forma obligatoria. Eso sí, algunas de las cosas que se pueden encontrar son realmente interesantes.
La pregunta que se hacen muchos s es si realmente es algo recomendable o si sería mejor olvidarse de la existencia de estas funciones secretas. Como ya te hemos comentado, se trata de un proceso sensible que solo hay que realizar en el caso de que tengas sólidos conocimientos del uso de Windows. Si piensas en los deportes de riesgo que se ven en televisión, donde se incluye una advertencia tipo «no pruebes esto en casa», el uso de estas funciones sería proporcional y equiparable.
Si no tienes cuidado, podrías bloquear el sistema o tener que reinstalar Windows. Lo mejor es que seas cuidadoso, que no toques o cambies nada que no sepas lo que producirá y que dispongas de una versión del sistema operativo a la que puedas volver en caso de que algo deje de funcionar. Si tienes dos ordenadores, uno de ellos un poco más antiguo o que no utilices como tu equipo principal para trabajar, jugar o estudiar, ese será, sin duda, el que deberás utilizar para hacer estas pruebas.